miércoles, 12 de mayo de 2010

¡Que se pare el mundo, me quiero bajar!


¡Abridme la puerta, necesito salir! Durante el día, la sensación de claustrofobia y de aversión al mundo ha ido aumentando por momentos. Como un payaso que no consigue reír. Como un hombre lobo en Paris. Como un río de gente, y yo a contracorriente. Como un perro enjaulado. Andando por la calle gente con paraguas debajo los balcones, y yo, mojándome, empapándome, por fuera. Y no saber cómo llorar. Ni como reír. Y saltar y descubrir que mi corazón pesaba demasiado.
¡Abridme, corred, abridme! En el día de hoy, lo único que he aprendido quizás es que Sugus es capicúa, ¿O ya lo sabía sin saberlo?...
¡Abridme, rápido, quiero escapar! Hoy he estado presionado por mis cuatro lados, mañana yo no sé, pero eso será, quizás, mañana.

¡Que se pare el mundo, me quiero bajar!
“como un sueño de loco sin fin
la fortuna se ha reído de ti”

1 comentario:

  1. Creo que mañana te espera una conversación conmigo. Sea empática o no, pero la tendrás.
    Y si bajarte del mundo implica tener que alejarte de mi, queda terminantemente prohibido, chatín. =)

    ResponderEliminar